martes, 10 de marzo de 2009

YO UNA VEZ LEÍ UN LIBRO, V. EL CONCURSO (O nunca te avergüences de ser un intelectual)

Hoy tenemos una nueva edición, la quinta, de mi ya famoso concurso “Yo una vez leí un libro”. La última edición resultó muy reñida y no tuvo final hasta que ARWEN ANNE del Blog “Pasado, futuro y sueños”, obtuvo el preciado galardón y 6 puntos. En este concurso se puede ser un intelectual, aunque tampoco es imprescindible, basta con tener buena memoria o que dé la casualidad de que te hayas leído el libro en cuestión y hayas sobrevivido, claro. Tampoco hay que saberlo de memoria ni tener una biblioteca en casa, con lo cursi que suena eso... Es un concurso basado en aquella genial idea del nunca bien llorado y desaparecido blog de Devin “El círculo de las almas perdidas”; aunque su concurso era de cine.

Como algunos ya sabéis, la cosa se trata de ir poniendo pistas y adivinar el autor y el nombre de libro al que pertenece el fragmento adjunto. Según las bases hay que ir dando una pista cada dos horas. Ahora que ya sé hacerlo, después del ensayo general de la última edición, voy a moderar los comentarios para que no os copies los unos sobre los otros, a ver qué sale de ahí. Así que no os preocupéis si no sale vuestro comentario a la primera, o si no eres el primer comentarista ni pollas de esas. Los iré poniendo siempre que no digan de qué libro se trata demasiado pronto, o cuando yo pueda, jajajá.

El premio, como ya sabéis, es un bonito carnet personalizado diseñado por ..OZ.. , por el cual ya suspira toda la blogosfera, y que puedes colocar en tu blog para mayor honor y gloria (mía, claro) y que no tienes que regalar en forma de meme ni nada a nadie más; pero, a cambio, todo el mundo puede ver que una vez leíste un libro…¡Y ahí estás, tan pancho!, jajajá. ¿A qué no te lo puedes creer? Un post sin memes ni premios que repartir, así por la gorra, solo por leer un libro..., solo mi prestigioso carnet de "acertador de libros". El único problema que yo veo es que leyendo un libro, igual aprendes algo, aunque sea sin querer, jajajá.

Bueno, vamos allá: La Quinta Edición del ya famoso concurso: “Yo una vez leí un libro”. Espero, igual que la última edición, que a nadie se le haya ocurrido colgar el librito en cuestión en Internet y se pueda encontrar mediante el simple procedimiento de buscar en el Google. Venga, que ser un intelectual tampoco está tan mal, si no lo piensas mucho, claro. Incluso hay quien dice que lo es Sánchez Drago. ¡Muchos son los intelectuales, pero poco los tuberculosos!, jajajá. Venga darle:


“Los asistentes se pegaron a las paredes desalojando por completo el centro de la sala. Pronto las cuatro salidas quedaron bloqueadas por los invitados que habían sido informados a última hora de lo que allí estaba pasando. Una atmósfera de tensión, parecida a la que se crea ante la inminencia de un desastre, era la que reinaba en torno a ella. Los cinco intérpretes se colocaron en la parte izquierda y la música comenzó, leve y cadenciosa, en el instante mismo en que las luces se apagaron, quedando sólo un foco iluminándola. Al principio fue visible únicamente su rostro: los ojos rasgados y, sobre todo, los labios negros. Si, sólo se veía su boca abriéndose apenas y emitiendo un silbido penetrante, muy agudo por momentos, después algo más grave, mientras a lo lejos una flauta secundaba sus movimientos. Los cabellos, oscuros y reflectantes, iban creando sinuosos oleajes en torno a su cabeza, que había empezado a oscilar lentamente. Las cejas ascendían, y también las pestañas, haciendo de esa parte de su cara un reino donde la mirada gobernaba con particular soberbia. Los dedos ascendían, suaves y secretos, obligando a que todos los ojos se fijasen en su boca de nuevo. Después fue también visible el cuello, en cuyo centro brillaba una turquesa; los senos de fiebre negra que la seda insinuaba y escondía; la espalda, tibia y ágil, cuando se daba la vuelta; las piernas iniciando desmayados descensos.

Ahora era casi todo verdadero, y perceptible el olor y el sabor, el calor y el frío…, y el miedo inconcreto que se siente a esa hora de la noche. La trompeta imitaba los sonidos del oboe, y los palillos resbalaban sobre la piel de los tambores como escarcha que una y otra vez se resquebraja.”


Por diez puntos ¿A qué libro y de qué autor es este fragmento?



PRIMERA PISTA:

A las 10,00: 1. Por 9 puntos: Es un escritror que pasó sus primeros años entre Barcelona, Madrid y Paris.

SEGUNDA PISTA:

A las 12,00: 2. Por 8 puntos: Licenciado en Historia trabajó, entre otras cosas, de portero de discoteca.

TERCERA PISTA:

A las 14,00: 3. Por 7 puntos: Esta novela obtuvo un importante premio en 1982.

CUARTA PISTA:

A las 16,00: 4. Por 6 puntos: Ha escrito, igualmente, una obra de teatro, y tres libros de poesía.

BUENO: A las 17:30 Hrs. voy a dar el concurso por finalizado. Efectivamente se trata del libro "Belver Yin" de Jesús Ferrero. Hay ya cuatro ganadores y parece que con las pistas emitidas ya resulta sencillo encontrarlo en Google. Así que en mi siguiente post, el carnet para los acertantes. Gracias a todos, es muy divertido, al menos para mí, claro... jajaj. Bezos.

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