miércoles, 1 de octubre de 2008

SINDICATOS

He tenido otra idea genial. De esas que solo se me ocurren a mi y que generosamente entrego a la Humanidad. Después de haber creado un Banco de Besos, una ONG: “Haz el bien punto. com”; después de inventar un Negocio de alquiler de calzoncillos, una Filosofía plateada e, incluso, una Religión, ahora se me ha ocurrido una nueva organización genial.

Se me ha ocurrido que ante la crisis económica que vivimos, en la que todas las fuerzas económicas están unidas: bancos hipotecarios, bancos de inversión, autoridades económicas, bolsas, empresarios, todos ellos preocupados por que pueden perder sus millonarias ganancias, salarios multimillonarios, stocks options, etc., al haber calculado mal los riesgos de dejar dinero sin garantías a los pobres burgueses del mundo en general, pues a mi se me ha ocurrido, decía, organizar una ¡unión de los trabajadores! Y hasta se me ha ocurrido el nombre, le llamaré SINDICATO, ¿a qué es genial?

Es tan genial que me extraña que a nadie se le haya ocurrido hasta ahora. No hay nada parecido en la historia. Bueno, creo que en España no hace mucho había algo parecido, se llamaban UGT y CC.OO. y decían también que protegían los derechos de los trabajadores. Pero que va. Cómo dependían de unos partidos políticos y estos consiguieron el poder, pues los que mandaban en esos sindicatos se sentaron en una poltrona y se quedaron tan contentos, y a los trabajadores que les vayan dando.

Por eso yo voy a crear un sindicato independiente globalizado (SIG) que defienda a los trabajadores de verdad. Y que defienda a los trabajadores de todo el mundo, un sindicato informatizado que una a los trabajadores de los dos lados del atlántico. De tal manera que si se ponen en huelga los obreros de la construcción de, pongamos por caso, Venezuela, se pongan en huelga esos mismos trabajadores en todo el mundo mundial. ¿Podrían tomarnos el pelo esos mismos capitalistas multimillonarios si todos los trabajadores del metal, por ejemplo, o los maestros, o los médicos, se pusieran en huelga en todo el mundo al mismo tiempo, como hace la Bolsa? No creo que aguantaran mucho.

Es que, no es por nada, pero yo veo que si no nos unimos, la crisis la acabaremos pagando los de siempre. Cuando el Estado acude a salvar estos grandes bancos en crisis, depredadores económicos que ya nos han estado robando todo este tiempo, somos todos los contribuyentes los que pagamos… Es tan fácil de entender que me extraña que no haya una revolución. Parece mentira que el capital se haya unido en una economía global y los trabajadores silbando en Benidorm. ¿Tu has oído la voz de los sindicatos ante la crisis? Pues yo no.

Yo es que no puedo con los bancos, ¿se nota? Viven como si ellos plantaran el dinero en el campo y lo tuvieran que regar todos los días. Pero eso no es así. El dinero es tuyo y mío, lo metemos allí como gilipollas y luego nos cobran hasta por respirar en aquellos suntuosos edificios pelín horteras. Eso si, te regalan una olla a presión si eres bueno. Te atienden como les da la gana en unas interminables colas en las que nadie protesta. Todo el mundo tiene miedo en un banco, y sin embargo vamos a protestar a los organismos estatales, porque todo el mundo sabe que los funcionarios no trabajan nada… Pero a los trabajadores de los bancos nadie les protesta aunque también van a desayunar a media mañana, ¡eh!

En fin, todo es un disparate. La Economía es una filfa sobre la que han montado todo una gran mentira. La riqueza cada vez está peor repartida y son menos personas en el mundo los que tienen más dinero. Todo se ha basado en artificios contables y económicos y así nos va. La Economía es la religión del siglo XXI y como toda religión es un cáncer para el pueblo. El capitalismo ha muerto, pero los obreros mientras viendo el fútbol y "¿Dónde estás, corazón?" Así nos va. Tenemos lo que nos merecemos.

En fin, ahí dejo mi idea: un Sindicato de Trabajadores… ¡Sencillamente genial! Iago siempre haciendo el bien.


Nota: Ayer decía Ángel en su blog "Collige Rosas" que "el comunismo ha muerto" y es imposible. Yo creo que no, que sólo está en un coma inducido por el neoliberalismo neocons. El que está gravemente enfermo, pidiendo a gritos una eutanasia, es el capitalismo.
"El País" (02/10/08)

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