GAZZPATXITO

GAZZPATXITO (Manera de hacer un blog mítico)

Ingredientes.
2 arrobas de gracia.
2 montonazos de buen humor.
2 hectómetros de cultura.
1 cabeza privilegiada en política.
1 don de lenguas y ½ de sexualidad.
½ de mala leche.
Sal, mucho mucho amor y champiñones a go-gó.

Preparación:

En un blog grande se echa todo bien lavado y limpito, todo troceadito, masticadito y bien peladito. Se bate bien todo en la batidora, no se agita (eh, no me seáis jamesbond). Una vez todo bien batidito se pasa por un filtro para quitar las asperezas, los tacos, las pepitas y los marrones.

Si ves que va quedando muy espeso, pones un poco de humor en contra de la Generalitat o añades champiñón (siempre para todo hay que poner mucho champiñón, por lo menos un par de champiñones). Así se le va dando la contextura que a todos nos gusta. Se le pone más sal, se pone ahora ración extra de amor; se da la prueba a tu abuela (antes vestida de pinche de cocina) y se mete en el frigorífico con las muestras recogidas de setas del día anterior.

Se sirve en recipientes individuales que cada uno puede tomar cuando quiera, y añadiendo lo que uno quiera: simpatía, lágrimas, cariño, comprensión, he visto de todo… y así cada lector se queda a “su gusto” Pero en general a la gente le gusta mucho el pepino (y esto no va con segundas).

Presentación:

Presentar en un blog grande o mejor gigante. Un blog tan grande como el corazón de su autor. Servir bien, con gusto y cariño. Hay quien se lo bebe directamente y hay quien se lo inyecta en vena.

Ahora estoy preocupado por el futuro del Gazpatxo. No de este plato tan mediterráneo, no. Estoy preocupado por uno de los blogeros que yo mas quiero, uno de los mejores sino el mejor de todos nosotros, el que derrocha simpatía, gracia, sabiduría y buen humor. Y ahora me tiene preocupado. Me preocupa el Gazpatxo.

No que tengas problemas con la justicia, no que tengas problemas con la administración autonómica, no que te atiborres a pastillas (que mira, si se está mal hay que buscar la ayuda donde sea, y la gente tiene mucho miedo a las pastis y a los psiquiatras y no sé porque). Pero cari, me preocupa tu bulimia.

He leído tanto de estas enfermedades de la alimentación, la anorexia y la bulimia que me he acojonado, cari. Por favor, te lo pido, come bien y con regularidad, todos los demás problemas se van a solucionar y ya verás como, finalmente, vendrás a Madrid y pondremos en Chueca ese restaurante naturalista y naturista en que los camareros serán chulazos en bolas y tu y yo estaremos allí solo para poner unos platos muy exóticos, sofisticados y sensuales (entre los que destacaran los champiñones preparados de mil maneras) y cobrar a la satisfecha clientela…

¡Por favor, cari, cómeme!