Ante la gravedad del peligro de la gripe esa, tan animal y bestia, que circula libremente por el mundo adelante, las autoridades sanitarias españolas aconsejan –en un gran golpe de ingenio- un “distanciamiento social” en las empresas para evitar los contagios. ¡Seguro que los virus esos se acojonan solo con oírlo, o se mueren de risa con lo gilipollesco de la medida!
Pero claro, he pensado yo, que eso lo hago mucho…, -bueno también, ahora que tengo novio follo mucho, pero eso es otra cosa, y será motivo de otro post-, y me he dado cuenta que aquí mismo, en la blogosfera sin ir más lejos, también corremos un peligro de contagio que te cagas. Al fin y al cabo, estos virus que provienen de los animales también nos pueden entrar a nosotros por el ordenatriz, y ¿alguien sabe si un bit o un megabit se distinguen fácilmente de un cerdo o, incluso, de una vaca loca? Y ya no digo nada de los usuarios, pues mira que los hay animales en los blogs, pero en los "otros" blogs, ¡eh! no en los nuestros, jajaja. Así que yo creo que también corresponde a alguien – y que mejor que yo que soy el puto amo de la blogosfera- declarar una situación de emergencia sanitaria y, lamentándolo mucho- un distanciamiento social entre bloguero. Así qué:
1. Quedan prohibidas las visitas a blogueros que pongan en sus blogs fotos de animalitos por muy graciosos que sean. E, incluso, se prohíbe leer y comentar post sobre animales, aún los más cariñosos; y todavía menos los que lleven chascarrillo dentro del tipo: “yo amo mucho a mi mascota” o “mi tortuga me pone cachondo”.
2. Cualquier bloguero que me estornude, me tosa o, incluso me grite, sin ir más lejos, quedará inmediatamente declarado en cuarentena blogueril. Y va a volver a leer su blog su madre.
3. Lamentándolo mucho se han terminado las pajas por Cam4; que si, como dice el gobierno, solo hablando te puede entrar un virus, no digamos nada si estas ciberfollando ¡te pueden meter cualquier cosa! Incluso te pueden meter un cuento chino, y hacer pasar por un rabo de 20 cm. lo que son solo 12.
4. Incluso para las conversaciones por MSN, será obligatorio el uso de mascarillas. Se oíra mucho menos, pero para lo que hay que oír muchas veces… Sobre todo quedan prohibidas- por lo contagioso- las conversaciones del tipo: “sigo enamorado de mi ex” o “me gusta mucho un amiguito que no sabe nada”. Estas situaciones son socialmente de las más contagiosas y saltan las fronteras sin ningún miramiento. A veces, incluso, el virus de tu ex es el mismo virus del ex de mi ex…, y eso ya es de internamiento en ciberhospital de por vida, y sin sociabilizarte nada ni con los médicos o sólo la puntita.
En fin, queridos amigos y amigas blogueras, queda prohibido, casi, socializarse los unos sobre los otros, y más amontonarse en el ciberespacio como si tal cosa, como si no pasara nada. Ya digo que, el que últimamente no visite tanto vuestros blogs, no es por que me mato a metérsela a mi novio con muchísimo gusto, sino a un auténtico “distanciamiento social” blogueril ante lo grave de la situación sanitara, y el avance animal de estos peligrosos virus tan recalcitrantes.
Ante la eficacia de medidas así...” ¡qué dios nos coja confesados¡”
Pero claro, he pensado yo, que eso lo hago mucho…, -bueno también, ahora que tengo novio follo mucho, pero eso es otra cosa, y será motivo de otro post-, y me he dado cuenta que aquí mismo, en la blogosfera sin ir más lejos, también corremos un peligro de contagio que te cagas. Al fin y al cabo, estos virus que provienen de los animales también nos pueden entrar a nosotros por el ordenatriz, y ¿alguien sabe si un bit o un megabit se distinguen fácilmente de un cerdo o, incluso, de una vaca loca? Y ya no digo nada de los usuarios, pues mira que los hay animales en los blogs, pero en los "otros" blogs, ¡eh! no en los nuestros, jajaja. Así que yo creo que también corresponde a alguien – y que mejor que yo que soy el puto amo de la blogosfera- declarar una situación de emergencia sanitaria y, lamentándolo mucho- un distanciamiento social entre bloguero. Así qué:
1. Quedan prohibidas las visitas a blogueros que pongan en sus blogs fotos de animalitos por muy graciosos que sean. E, incluso, se prohíbe leer y comentar post sobre animales, aún los más cariñosos; y todavía menos los que lleven chascarrillo dentro del tipo: “yo amo mucho a mi mascota” o “mi tortuga me pone cachondo”.
2. Cualquier bloguero que me estornude, me tosa o, incluso me grite, sin ir más lejos, quedará inmediatamente declarado en cuarentena blogueril. Y va a volver a leer su blog su madre.
3. Lamentándolo mucho se han terminado las pajas por Cam4; que si, como dice el gobierno, solo hablando te puede entrar un virus, no digamos nada si estas ciberfollando ¡te pueden meter cualquier cosa! Incluso te pueden meter un cuento chino, y hacer pasar por un rabo de 20 cm. lo que son solo 12.
4. Incluso para las conversaciones por MSN, será obligatorio el uso de mascarillas. Se oíra mucho menos, pero para lo que hay que oír muchas veces… Sobre todo quedan prohibidas- por lo contagioso- las conversaciones del tipo: “sigo enamorado de mi ex” o “me gusta mucho un amiguito que no sabe nada”. Estas situaciones son socialmente de las más contagiosas y saltan las fronteras sin ningún miramiento. A veces, incluso, el virus de tu ex es el mismo virus del ex de mi ex…, y eso ya es de internamiento en ciberhospital de por vida, y sin sociabilizarte nada ni con los médicos o sólo la puntita.
En fin, queridos amigos y amigas blogueras, queda prohibido, casi, socializarse los unos sobre los otros, y más amontonarse en el ciberespacio como si tal cosa, como si no pasara nada. Ya digo que, el que últimamente no visite tanto vuestros blogs, no es por que me mato a metérsela a mi novio con muchísimo gusto, sino a un auténtico “distanciamiento social” blogueril ante lo grave de la situación sanitara, y el avance animal de estos peligrosos virus tan recalcitrantes.
Ante la eficacia de medidas así...” ¡qué dios nos coja confesados¡”
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