domingo, 1 de julio de 2007

TE AMARÉ NUNCA

Bueno, ya estoy aquí otra vez, a ver qué pillo. Hoy está esto lleno de gente, la competencia va a ser dura; hay muchos desesperados como yo.

La verdad es que me costó levantarme de la cama. Estaba allí la mar de contento viendo “Mujeres desesperadas” y fumándome un porrito y malditas las ganas que tenía yo de levantarme. Me repatea que para ir por el ambiente de cacería haya que salir tan tarde; antes de las dos de la madrugada no puedes llegar a ningún sitio si no quieres parecer “una desesperada”. ¿A ver ese que tal está? No, no vale nada, ese solo quiere tontear, nunca se anima, ya me conozco yo ese cuento.

La verdad es que esto es duro, a mi me gustaría no tener que venir por aquí, pero no sé dónde podría hacer lo mismo. Y todos lo necesitamos; unos lo confesaran y otros no, pero lo necesitamos todos; si lo sabré yo. Y aunque a veces no tengo ganas, y casi preferiría quedarme en casa y hacerme una buena paja con alguna peli porno, enseguida venzo esa pereza. Me engaño a mi mismo pensando que hoy va a ser el último día, pero en el fondo no quiero dejarlo. Yo creo que lo hago porque me gusta. ¡Joder! Ese tío lleva un traje de Armani, pero nada, yo pasando, a mi bola, haciéndome el interesante, si quiere algo ya vendrá.

Así que ya me tienes a mí, duchándome a la una de la madrugada que las vecinas ya piensan que estoy loco, un día un médico de esos que he conocido tantos me contó que los esquizofrénicos se duchan mucho, tres y cuatro veces al día. Igual yo estoy esquizofrénico, no sé; pero ¿qué quieres? con el calor que hace en Madrid y a mí que me gusta salir a ligar limpito… ¡Puf! ¡Éste…! Este me invita a una copa pero es un rollista, y está casado y yo no soporto a los gays casados aunque sea para echar un polvo en el baño; casados no.

Bueno, hoy me he puesto así en plan un poco chulazo de más, lo sé; con camiseta sin mangas enseñando el tatuaje y un vaquero petado, con una gruesa cadena de oro al cuello. Pinta de macarra, eso siempre tiene éxito ¡verás! No se qué coño le pasa a estos gays, pero un tío con pinta de malote les vuelve loco. ¡Bueno, ese tío no deja de mirarme! ¿Se decidirá? No estoy aquí para perder el tiempo, ¿cuándo se darán cuenta de que venimos a lo que venimos?

¡Qué aburrimiento! Esto es un rollo. Siempre la misma música y los colegas de por aquí es que no sirven ni para tomar por el culo; no tienen ni media conversación, no se puede hablar de nada con ellos. Que una cosa es venir a follar y otra es no saber hablar de nada. ¡Oh no! ¡Y este tío no! con este tío ya he me lo he montado otras veces y es de los peores, es de los que se enamoran ¡joder!, se cree que por cincuenta putos euros de mierda que le cobro por un polvo, le voy a dar aún encima amor, está listo… ¡ahí viene!

No hay comentarios:

Publicar un comentario