1. Como ahorrar en gasolina.
Herramientas: 1 desatornillador, 1 tubo de 1 metro. Un recipiente.
Localiza en tu calle o urbanización aquellos coches que tienen un tapón de la gasolina sin cerradura. Vigila los hábitos del propietario y, si es posible, averigua cuando va a la gasolinera (normalmente cuando va si su señora, cantando alegremente un domingo por la mañana, sobre todo si vuelve con el coche lavado). Esa misma noche, “irrumpe” en su tapón del depósito de gasolina que deberás abrir con la ayuda del destornillador y “confisca” su gasolina que mediante un pequeño chupón con el tubo harás “fluir” por el principio científico de”vasos comunicantes” al recipiente obtenido al efecto. ¡Y de ahí a tu depósito! Ahorra tanto como robes… (Al fin y al cabo lo hacen los bancos y nadie le dice nada).
Peligrosidad: Poca.
Ahorro: Considerable.
Dificultad: Baja.
2. Como ahorrar en la merienda.
Herramientas: Una barra de pan tamaño medio. Una loncha de jamón.
Prepara un bocadillo con la única loncha de jamón que posees, pero “aligerada” por la zona central de tal manera que sobresalga por la raja del pan, pero que te guardes el corazón de la loncha (lo más rico por otro lado). Le enseñas el bocadillo así “dispuesto” a un compi que tenga un bocadillo de mortadela, y cuando este trague muerto de envidia al ver los filamentos del jamón saliendo del pan, le ofreces un “intercambio de libre comercio”. La mortadela alimenta lo mismo pero los bocadillos suelen ser más generosos, sin olvidar que previamente habrás “catado” la zona central de la loncha jamonera. Se le conoce como el intercambio del “tocomocho” porque tu compi pensará que le ha tocado la lotería con tanto jamón y quiere timarte, ¡mira que listo!
Peligrosidad: Alta, salvo que se tenga la precaución de buscar un compi más pequeño que tú.
Ahorro: Considerable, pues se ahorra mucho en embutido.
Dificultad: Baja.
3. Cómo ahorrar en camiseta del H&M.
Herramientas: un ligue calorro, un imán de considerables proporciones (1 tonelada o así), una mochila.
¿Quién no quiero sacarse todos los viernes una camiseta en el Spank? (bueno, esta pregunta está mal planteada. Para sacarse una camiseta primero hay que “mercarla”, estrenarla, y luego pillar un ligue con quién quitársela, pero ese es otro tema que excede las recetas de este post… ¿no te voy a contar como ligo yo, no?).
Se coge al calorro, se le lleva a dar un paseo por el centro y se le “introduce” en la "economía de mercado" en el H&M a horas puntas. Si el calorro tiene el imán de “producción” propia mejor, sino puedes comprarlo en una ferretería. Le dices al calorro que "a que no eres capaz de quitar el antirobo de esa camiseta que me gusta" y visto y no visto. Se “eligen” las prendas más alegres y vistosas, luego te follas al calorro en el vestuario y, finalmente la parte más difícil, te deshaces de él. Y ya está; a “estrenar” camiseta obtenida por el procedimiento de “trueque”: tu me robas y yo te la meto.
Peligrosidad: Mucha. El calorro cabreado se puede sentir utilizado y perseguirte hasta la tumba que los calorros de hoy no son como los de antes y tienen su corazoncito, sino mira en el Bakala.
Ahorro: Considerable. Las camisetas no las regalan en el H&M que les cuesta mucho fabricarlas a los tíos, explotando chinitos.
Dificultad: Eso depende de tu habilidad para echar un polvo en un vestuario del centro en horas punta, pero se puede, te lo digo yo.
4. Cómo ahorrar en copas.
Herramientas: Un rostro a prueba de bomba.
Bueno, este sistema es tan sencillo que me produce sonrojo el explicarlo. Se trata de estar en la lista de alguna discoteca de moda (verbigracia la Cool), siendo el mejor procedimiento dejarte tocar el paquete -el culo suele ser menos apetecido- por algún relaciones publicas de una discoteca hot). Una vez “introducido” tu cuerpo en tan selecto ambiente se trata de vigilar al marchoso de turno que pide una copa en la barra mientras ya está moviendo el esqueleto al ritmo de la música. En cuanto la “deposita” en la barra y se marcha a la pista, esa copa pasa a estar “abandonada” y es de “público dominio”. Puedes “tomar posesión” de ella tan ricamente y sin abonar ni un euro. Sencillo y eficaz.
Peligrosidad: Mucha, puedes agarrarte un pedo que te cagas y cuándo vean que eres el que más potas de la fiesta, todos los ojos te mirarán a ti. Te acusaran de “monopolista” y de “intervencionista” y de "romper el mercado" Tu pasando de todo, como si fueras el G8.
Ahorro: Indecible. Con lo ahorrado puedes jugar en bolsa e, incluso, ganar.
Dificultad: Ninguna, ¡está chupado!
En fin, después de estos consejos, no ahorra el que no quiere. Podrás pagar la hipoteca basura e incluso tener unos ahorritos para cuando pase la cri… ¡uy! no, la “desaceleración acelerada” con unos métodos y sistemas que te permitirán manejarte como dios manda por la sociedad capitalista como un millonario cualquiera.
Iago enseñando a los pobres. Iago siempre haciendo el bien.
Comentarista Plateado del Dia: Creo que es justo que hoy se comparta entre Dr. Carlos Becerra que ha estado muy ingenioso, y mi Pepe que no ha parado de comentar ¡una máquina!... jajaja
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