

Y hablan de unas series míticas que yo lo flipo en colores. Uno hablaba de Ed, ¡un caballo que hablaba! Otros de una panda de niños que se pasaban todo el verano azul cantando gilipolladas con un pescador de nombre Chanquete. Un perro detective que se llamaba Rintintín; una par de gays (Epi y Blas) que les enseñaba el mundo a los niños; un erizo rosa (sin duda fruto de alguna mente igualmente gay) llamado Espinete que también hablaba; y la impresentable Alaska haciendo de bruja…que es lo único que ha hecho en toda su vida, por otro lado. ¡La verdad no me extraña que estéis todos los mayores mal de la olla y un poco neurót

En cualquier caso yo no voy a esperar cincuenta años para contar cuales son mis series preferidas ahora que estoy dejando atrás la adolescencia. Soy un preadulto postadolescente, de ser algo. Y para acordarme, entonces de bloguero adulto, casi voy a dejar ese post “rememoratriz” ya escrito.
Mis series preferidas no son ninguna de esas míticas que le gustan a todos los intelectuales: Ni “Héroes” ni ninguna de esas tan culturetas de la Cuatro; ni “El Internado”, ni siquiera “Sin tetas no hay paraíso”. Como ahora hay tele digital yo veo esas nuevas cadenas, Sony, Disney, etc. Y de todas las series que están poniendo la que mas me gusta es “Will y Grace” (aunque creo que ya es antigua). Se trata de una pareja formada por un gay madurito y una judía a


Y ahora, para colmo, y esto no lo puedo decir sin sonrojarme, estoy enganchado con la versión infantil – si no infantiloide,- de Betty la Fea, llamada "Patito". Pero estoy enganchado de verdad, hasta el punto que voy a buscar a mi primita de cuatro años para ir juntos al parque cantando sus canciones: “Yo no soy de las divinas…” Es que me encantan sus números musicales y el acento argentino de todos los p

Y ya está, así ya tengo escrito un post que me ahorraré escribir dentro de cuarenta años. Igual en esas fechas no me tenga que poner colorado al contar al mundo mis series televisivas preferidas, como ahora, jajaja. Espero que las de entonces sean todavía peores. Pero, de momento, es lo que hay y lo que yo veo... Ya sé que con un rabo de 19 centímetros, soy un moñas en mis gustos televisivos. Pero ¿qué esperáis de alguien que le pide a los Reyes un muñeco de Pocoyó? Porque "Pocoyó" es, en realidad, la serie que más me gusta, ¡Y lo peor es que me lo trajeron…! (mi novio que es muy salao, el ijoputa, jajaja). Bezos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario