
A mi que me gusta cumplir (y más en la cama, jajaja) se me ocurrió ofrecerte a Mario ese bezo especial en forma de poema. Cuasi un soneto (se volviera) ¡Elo aquí!
Pensando cómo entregarte
El beso que yo te debía,
Mi lengua sola partió
Corriendo por la Gran Vía.
¿A dónde vas? Yo le gritaba
Pero ella ya no me oía,
Voy a la boca de Mario,
Y mientras hablaba, reía.
Vuelve a tu sitio ladina,
Yo sin éxito le decía,
Pero no se amedrentaba
Ni con la nieva que caía,
¡Regresa lengua rebelde
Que no admito negativas!
¡Que a nada te sabrá Mario,
Sin las papilas gustativas…!
Jajaaj ¿A qué mola? En fin, prometo bezo especial para el seguidor 150 y 200 que David ya va por ciento cuarenta y tantos. Estoy perdido, si hace falta me prostituyo, jajaja. Bezos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario